martes, 11 de junio de 2013

salts & suits





Venga, un minireseña editorial que nunca viene mal... Nuestro trabajo como editor de libro de surf nos condena a interminables horas de lectura en busca de ese libro, de esa historia, de esa foto que nos haga tilín y nos anime a invertir, traducir y lanzar al mercado un libro de surf para que lo devoren las fieras.

Últimamente estamos con la obra de Phil Jarratt entre manos, y le estamos dando vueltas a títulos como "Surfing Australia", "Australian 100 Hottest Surfing Legends" o "Salts & Suits", para ver si tienen encaje en nuestro mini-mercadillo editorial surfero. La cosa tiene mala pinta...

Cuatro rayas a cuento de "Salts & Suits", que los demás, son ilustrados, y no tienen tanta miga, ya que tienen un enfoque más enciclopédico que otra cosa. Bueno, al lío... Más o menos, y leyendo el libro, uno le podría dar ese significado, el título vendría a ser algo parecido a "Neoprenos vs. Corbatas", o algo así, resaltando así los dos perfiles de individuos que han intervenido en la creación de esos grandes imperios de moda surfera que han tiranizado/sodomizado el mercado durante los últimos veinte años. Irónicamente, al estar escrito en el 2010, el libro no puede incluir los últimos y suculentos acontecimientos de estos monstruos empresariales, y que en muchos casos, implica que algunos de ellos se están yendo al carajo por la vía directa...

Pues eso, un libro que explica la trayectoria de estas empresas, desde sus inicios en diferentes partes del mundo, pero sobretodo Australia (la vaca nació en Australia, pero la engordaron y ordeñaron a base de bien en América y Europa), y sobretodo habla de sus fundadores, en algunos casos, unos pelanas, unos fumados de tres al cuarto que han acabado podridos de dinero hasta las trancas. Eso sí, fumados, pero listos como ellos solos... Que aunque es cierto que hace años, había mucho por hacer, estos tíos de tontos no tenían un pelo...

Por su parte, de manera algo subrepticia y maliciosa, el autor,(que era uno más de la cuchipandi, de ahí su síndrome de Estocolmo) al distinguir entre "Neoprenos y Corbatas", toma partido por los primeros, los fundadores de las empresas, los hippies, los guays, y carga bastante las tintas en los segundos, en los gestores, los directivos, los que no surfeaban, y en algunos casos, parece culparlos de todos los males, y de la "pérdida del alma de estas empresas". Que cada uno extraiga sus conclusiones, y en cualquier caso, creemos que todos pusieron de su parte para que las cosas hayan evolucionado de la manera en que lo han hecho... Interesante ver como, por ejemplo, gente como Harry Hodge, de Quiksilver, no son ese angelito salvador de Miki Dora que nos presenta Rensin en "Todo por un puñado de olas perfectas", y hacen también de las suyas.... Con la diferencia que las estafas de Dora a veces se limitaban a unos pocos cientos de dólares, y las perrerías de estos, en algunos casos, han supuesto batacazos astronómicos que se han llevado a todo quisqui por delante...

Ah, sí, se me olvidaba, el libro, sólo en inglés, y por el momento, dudo que nadie lo saque en castellano...

Salut niños!

3 comentarios:

Niegà dijo...

Lo lei hará un par de años y me encantó. Muy recomendable y lástima que no entre más a fondo en lo que pasaba en esas parties de la surf industry durante los tiempos de bonanza. Algunas historias son dignas de Fear and Loathing in Las Vegas!

Niegà

Mr. Gee Beaumont dijo...

Efectivamente, el autor deja intuir el ritmo que llevaba aquella tropa y que muchos esos directivos se pasaban el día cargaditos con todo tipo de sustancias en sus narices / venas /estómagos...

Niegà dijo...

Sí, quien lo hubiera dicho... en Biarritz con todas esas casas tan señoriales y tanto pseudoglamour de pacotilla... jejejejeje